Al llegar la oscuridad de la noche, un pequeño destacamento de guerreros se había instalado en la entrada del campamento de la Fuente Oculta. Una mezcla de miembros Merodeadores del Clan de la Cenizas y de los Rebeldes de las Naciones estaban discutiendo en el sofocante calor del verano.
"¿Alguien sabe a qué esperamos aquí? Necesito desahogarme con algunos hómins, no quedarme aquí sin hacer nada", se quejó un primer Merodeador. Otro que estaba masticando un pedazo de comida, sin mucha convicción, dijo: "¡Además, la comida es vil. Esperemos que no tengamos que conformarnos con carne de Cuttler por mucho tiempo... !"
Un Matis del Consejo de la Disensión trajo algo de información para los ignorantes: "¿Qué acaso Akilia no les dijo que era para ayudarnos?"
"No... no estamos en la confianza, somos subordinados, entonces necesariamente ..."
"En cualquier caso -añade una tercer Merodeador- las instrucciones son claras: '¡Tengan armas afiladas y buenas botas' , hay rumores de que una larga caminata a través del Bosque nos espera...!"
El primer Merodeador se encogió de hombros: "Por lo tanto en este momento, no hay nada en concreto. Espero que las órdenes lleguen muy pronto, para que por fin tengamos algo de acción."
A regañadientes y conteniendo su furia, el Merodeador cogió un pequeño escorpión que estaba a su alcance, le cortó la mitad de sus piernas con la punta de la espada y luego contempló por largo rato como el arácnido se retorcía patéticamente.
"¿Alguien sabe a qué esperamos aquí? Necesito desahogarme con algunos hómins, no quedarme aquí sin hacer nada", se quejó un primer Merodeador. Otro que estaba masticando un pedazo de comida, sin mucha convicción, dijo: "¡Además, la comida es vil. Esperemos que no tengamos que conformarnos con carne de Cuttler por mucho tiempo... !"
Un Matis del Consejo de la Disensión trajo algo de información para los ignorantes: "¿Qué acaso Akilia no les dijo que era para ayudarnos?"
"No... no estamos en la confianza, somos subordinados, entonces necesariamente ..."
"En cualquier caso -añade una tercer Merodeador- las instrucciones son claras: '¡Tengan armas afiladas y buenas botas' , hay rumores de que una larga caminata a través del Bosque nos espera...!"
El primer Merodeador se encogió de hombros: "Por lo tanto en este momento, no hay nada en concreto. Espero que las órdenes lleguen muy pronto, para que por fin tengamos algo de acción."
A regañadientes y conteniendo su furia, el Merodeador cogió un pequeño escorpión que estaba a su alcance, le cortó la mitad de sus piernas con la punta de la espada y luego contempló por largo rato como el arácnido se retorcía patéticamente.