EVENTOS

oren pyr!

El juicio del homin Atreus, que decía ser el sharükos Dexton regresado de entre los muertos, ha llegado a su fin.

Después de largas investigaciones, interrogatorios y consultas, el sharükos Lykos ha llegado a un veredicto sobre esos dignatarios del Imperio que han apoyado a este homin, desde el principio o desde hacía un tiempo en secreto, y así actuar en contra del dominio del sharükos y dañar los pilares de la Verdad, el Honor y la Disciplina.

Hay otra cosa que necesito anunciar. Unos días atrás, Atreus, tío del sharükos Lykos y hermano menor del sharükos Dexton, ha pasado a mejor vida. Sucumbió a los achaques de su edad, debilitado por la enfermedad real. Nuestro sharükos y su madre estaban con él cuando murió y el sharükos Lykos le ha garantizado un funeral en Pyr.

Malos, el tiempo de la incertidumbre ha acabado, este capítulo está cerrado. Antes de que el sharükos exponga su fallo sobre los acusados, permite al Maestro Ardiente Decalion Krilus hablar con vosotros.

oren pyr, sharükos Lykos, celiakos, malos.

No soy un homin de muchas palabras. Desde 2513 he actuado como el Maestro Ardiente de los Caras Quemadas cuya tarea es funcionar como la guardia personal del Emperador. Además he restaurado mi honor a ojos de mi sharükos, no puedo arriesgar a que la vergüenza que he puesto sobre mis hombres proyecte una sombra sobre los Caras Quemadas. Así que, por esta vía dimito como Maestro Ardiente y como miembro de los Caras Quemadas.
akash i talen!

orak i akash, talen i rechten, celiakos, akenak i malos!

Un fuego arde en nosotros. El fuego nos da fuerza, pasión, el instinto de supervivencia, y calienta nuestra sangre. Pero también amenaza con consumir nuestras mentes, cegarnos, abrasarnos si no lo mantenemos al margen. No debe embravecerse libremente.

Aquellos que reciben su sentencia hoy no son castigados por el fuego que arde en su interior. Son castigados por dejar a su fuego cruzar esos límites. La Verdad, el Honor, la Justicia y la Disciplina previene a nuestra gente de ser consumida por el fuego en nuestro interior, sin ellos todo ardería hasta las cenizas.

Aquellos que hayan apoyado la causa de Atreus fallaron en apoyar nuestras virtudes y me estaban traicionando. Algunos lo hicieron por motivos sentimentales hacia el homin que les recordaba a mi padre, otros por la esperanza de poder e influencia. Pero todos olvidaron sus tareas, su disciplina, su honor.

Atreus a pasado a mejor vida. Que los ancestros le juzguen y decidan sobre su culpa.

Celiakos Euracus Cethus, te fue dada la confianza por mi y tuve la esperanza de que podrías ayudar a cerrar la fisura entre los patriotas, pero fallaste. Te has revelado inservible para mantener la posición de celiakos. Estad de esta manera eres despojado de tu título como celiakos. Lo recuperarás a mi voluntad si eres capaz de completar una misión que te daré para restaurar tu honor.

Decalion Krius, al final has mostrado honor y sentido de la responsabilidad. Se te concede la amnistía y el perdón.

Epus Xalaus, has servido bien a nuestra familia durante todos estos años y esto no se olvida. De todas maneras, tus acciones y los secretos que guardas no pueden quedar impunes. Estás de esta manera desterrada del sharük y deberás abandonar el Desierto Ardiente dentro de un año de Jena y no regresar jamás bajo pena de muerte.

Finalmente, a todos los patriotas que creyeron en Atreus y lo siguieron: mostraré misericordia por última vez. El fuego que amenazaba con consumir el Imperio ha sido extinguido. Actuaré con dureza para apagar cualquier futuro fuego o injusticia, infamia, mentira o traición.

No olvidéis nunca que el Imperio descansa sobre los cuatro Pilares de igual fuerza y altura, de otro modo el Imperio estaría desequilibrado y caería. Honor (akash), personal y cerca a nuestros corazones, que debe encajar con la Disciplina (orak) para asegurarse de encontrar la Verdad (talen), y los tres deben ser iguales ante la Justicia (rechten).

orak i akash, talen i rechten! oren fyraï.