Lore & Chronicles

Rocho se perdió por un momento en la contemplación de la espuma que había dejado el vino licoroso en las paredes de su cáliz floral. Un toque en el hombro le trajo de vuelta al presente y él levantó sus ojos a sus interlocutores, que parecían aferrarse a sus labios. En otras circunstancias, los ricos ornamentos de estos Matis habrían sido capaz de eclipsar el resto de la gloria que se ataviaba Rocho, pero en la situación actual, su experiencia le dio una autoridad de la cual disfrutaba los beneficios. Soltó una risa de grasa. Como era de esperar, la confusión ganó sus huéspedes Matis. Detrás de él, la chica del Arisco aprovechó la oportunidad para deslizar una palabra en el oído.
Rocho exclamó, solemne : “! Vosotros tendréis vuestros mercenarios ! Pero no se presentéis más en frente de mí sin resultados, o os pesará ! ”
Después de la salida de los nobles, un joven Matis se deslizó en la tienda de campaña. Su estatura frágil acentuaba su aspecto juvenil.

- “¿ Padre, usted me llame ? ”
- “Sí, hijo mio. Es hora de demostrar tu capacidad. Es esencial si quieres suceder como jefe de la tribu. Así que te mandaré en una misión encubierta en Yrkanis. Vigila a los nobles disidentes para mí, y procura integrarte en el Reino. ”

El joven Matis echo un vistazo inquieto en la dirección de la hija del Arisco cuya silueta se adivinaba en la sombra. Después de un breve silencio, se atrevió a tomar la palabra de nuevo.

- “ Muy bien, Padre. Mis estrofas le informaran, lo le aseguro. ”

Rocho aprobó con la cabeza y concluyó.
- “ Ten cuidado, por encima de todo : nadie debe sospechar quien eres ! ”

Más tarde esa noche, un homin encapuchado salió del campo de los Primeros Desertores y se adentró en el bosque en dirección a Yrkanis.


Extracto de un cubo de ámbar titulado “El precio de La Libertad”