Cuento de Lutrykin - Vigilia de los cuentos de Atysmas del año 2606 de Jena (29-12-2019)
Originalmente escrito y hablado para Atysmas 2011 por Napseis.
Los árboles de Atysmas
Esta noche voy a contarles una aventura - ¡la historia verdadera! - de cuatro homínidos.
Nuestro grupo de amigos está compuesto por un Tryker, un Matis, un Fyros y un Zoraï, todos reunidos juntos para celebrar Atysmas en paz.
Habiendo decidido celebrar en las Alturas Verdes, nuestros cuatro compañeros se reunieron en Yrkanis y decidieron ir y disfrutar el espectáculo que el bosque nevado les ofrecía.
El bosque los rodeaba blanco y puro como un capullo de nieve.
Travieso como siempre, el Tryker juega en la nieve.
Al darse cuenta que estaba lejos de sus compañeros, el decidió colocar fuegos artificiales en un árbol de abeto para sorprender a sus amigos.
Y ¡que sorpresa!
¡El árbol permaneció allí, majestuoso e iluminado! En frente de tanta belleza ellos se dijeron que tenían que dejar que otros homínidos lo disfrutaran.
¡Como les gustaría admirar esos encantos cada noche en la quietud de su hogar, fumando un buen musgo perfumado con savia de enola!
Sin demora, nuestros amigos empezaron a pensar. El Fyros les ofreció, directamente, cortar el árbol y llevarlo en su espalda.
El Matis les dijo que el sabía como preservar la bella planta, aunque el pensaba que el proceso sería un poco brutal.
Finalmente, el Zoraï les dice que el sabía como encantar el árbol de tal modo que nunca dejara de brillar.
De regreso en la ciudad, los niños corrieron alrededor de la extraña procesión, deleitados y sobre-excitados ante tal maravilla. ¡Es hermoso, es inmenso y brilla!
Conmovidos por los gritos de júbilo de sus hijos, los padres decidieron solicitarles a los homínidos que compartieran su hallazgo.
Y es así, desde aquel momento, en cada hogar en Atysmas, podemos encontrar un bello árbol de abeto iluminado, simbolizando la unión de los chispeantes Trykers, los astutos Matis, los sabios Zoraï y los laboriosos Fyros.
Originalmente escrito y hablado para Atysmas 2011 por Napseis.
Los árboles de Atysmas
Esta noche voy a contarles una aventura - ¡la historia verdadera! - de cuatro homínidos.
Nuestro grupo de amigos está compuesto por un Tryker, un Matis, un Fyros y un Zoraï, todos reunidos juntos para celebrar Atysmas en paz.
Habiendo decidido celebrar en las Alturas Verdes, nuestros cuatro compañeros se reunieron en Yrkanis y decidieron ir y disfrutar el espectáculo que el bosque nevado les ofrecía.
El bosque los rodeaba blanco y puro como un capullo de nieve.
Travieso como siempre, el Tryker juega en la nieve.
Al darse cuenta que estaba lejos de sus compañeros, el decidió colocar fuegos artificiales en un árbol de abeto para sorprender a sus amigos.
Y ¡que sorpresa!
¡El árbol permaneció allí, majestuoso e iluminado! En frente de tanta belleza ellos se dijeron que tenían que dejar que otros homínidos lo disfrutaran.
¡Como les gustaría admirar esos encantos cada noche en la quietud de su hogar, fumando un buen musgo perfumado con savia de enola!
Sin demora, nuestros amigos empezaron a pensar. El Fyros les ofreció, directamente, cortar el árbol y llevarlo en su espalda.
El Matis les dijo que el sabía como preservar la bella planta, aunque el pensaba que el proceso sería un poco brutal.
Finalmente, el Zoraï les dice que el sabía como encantar el árbol de tal modo que nunca dejara de brillar.
De regreso en la ciudad, los niños corrieron alrededor de la extraña procesión, deleitados y sobre-excitados ante tal maravilla. ¡Es hermoso, es inmenso y brilla!
Conmovidos por los gritos de júbilo de sus hijos, los padres decidieron solicitarles a los homínidos que compartieran su hallazgo.
Y es así, desde aquel momento, en cada hogar en Atysmas, podemos encontrar un bello árbol de abeto iluminado, simbolizando la unión de los chispeantes Trykers, los astutos Matis, los sabios Zoraï y los laboriosos Fyros.